14 Oct 2024

Óscar Landerretche: “Lo que sirve para restablecer la confianza es la comunidad”

En el Seminario USEC “Llegó la hora de la confianza: Del diagnóstico a la acción”, Josefina Araos, Óscar Landerretche, Antonio Walker e Ignacio Yarur hicieron un llamado a actuar en y por la comunidad como el camino para reconstruir las confianza desde el mundo de la empresa.  

Las encuestas han abordado la crisis de confianza desde diferentes aristas –las personas, familias, empresas y organizaciones, y el gobierno–, diagnosticando un deterioro transversal en la confianza pone en cuestión la democracia y tiene repercusiones en los mercados. Para hacer frente a este escenario, USEC organizó el Seminario “Llegó la hora de la confianza: Del diagnóstico a la acción”, el jueves 10 de octubre por la mañana en Club 50 y transmitido en vivo por EmolTV y nuestro canal de YouTube REDUSEC, donde contó con casi 110.000 conectados.

En el encuentro, la periodista Angélica Bulnes, frente a una audiencia de más de 140 personas, intercambió ideas, visiones y propuestas para robustecer el tejido social, con Josefina Araos, subdirectora de Investigación del Instituto de Estudios de la Sociedad (IES); Óscar Landerretche, ex Presidente de CODELCO y académico de la Universidad de Chile; Antonio Walker, Presidente de la Sociedad Nacional de Agricultura (SNA) y ex ministro de Agricultura; e Ignacio Yarur, director de BCI. En la conversación llegaron a un consenso general: Toda empresa debe tener entre sus pilares el actuar en y por la comunidad.

La empresa, motor de progreso social

Para el Presidente de USEC, Enrique Cruz, el coloquio fue un punto de partida para generar acciones concretas y coherentes que demuestren el compromiso por recuperar las confianzas, el bien común e impulsar el desarrollo del país de manera integral. “El desafío que enfrentamos no es menor. Como empresarios, ejecutivos y emprendedores cristianos, entendemos que nuestro rol en la sociedad no es solo económico, sino también ético y con un fuerte rol público que cumplir. Tenemos la oportunidad de dar un paso adelante. Ya no es suficiente señalar los problemas, debemos ser parte activa de la solución”, explicó.

En esa línea, Josefina Araos explicó que en el IES “nosotros tratamos de aportar a ser un poquito menos frágil esa desconfianza, tratar de revertirla un poco, desde la especialidad de nuestra función, que es a participar en la discusión pública desde nuestro ideario, tratando de pensar los problemas de Chile”. Agregó que aspiran a “que el IES sea una plataforma de discusión entre personas que piensan diferente, […] y tratar de llegar a algún tipo de acuerdo, justamente también pensando en cómo pasar del diagnóstico de todas las cosas que están tan mal a la acción, a tratar de trabajar por revertir el tipo de problemas que tenemos”.

Desde su perspectiva de empresario, Ignacio Yarur enfatizó que “nunca hay que olvidar que la principal función de la empresa no es ganar plata, sino que ser un vehículo y un motor de progreso social. Cuando una empresa es capaz de generar confianza en todos sus grupos de interés, no solamente está pavimentando su sustentabilidad en el largo plazo, sino que además se está transformando en un motor central del progreso de una sociedad”. Para ello, según el director del Banco BCI, “la empresa debe tener un liderazgo en el ir construyendo las soluciones que nosotros les entregamos a los clientes, a los colaboradores y a la ciudadanía, justamente con esos grupos que no se ven representados”, profundizó.

La empresa, llamada a crear comunidad

“Lo que sirve para restablecer la confianza es la comunidad y la única forma de tener confianza en otro ser humano es que yo lo conozca”, propuso Óscar Landerretche. “Nos tenemos que hacer cargo de que la misión central de ser empresario, profesor y de ser político, es hacer bien nuestro trabajo y darle valor, de una manera consistente de la misión de crear comunidad desde tu propio lugar dentro de la sociedad”, profundizó.

En ese sentido, Antonio Walker aseveró que “muchas veces dentro de la misma empresa se hace poco esfuerzo por preocuparnos más allá de la relación laboral y comenzar a preocuparse más de la historia de familia o de la persona que trabaja conmigo”. A modo de autocrítica, señaló que “creo que a todos, en el mundo gremial, en el mundo empresarial, en el mundo político, nos falta tomar la acción concreta. Y la acción concreta es el testimonio de ir creando un mejor país y pensar en el bien del otro y salirnos un poquito del metro cuadrado propio”.