26 Jun 2020

#USECteConecta: Contagiémonos de solidaridad – Francisco Elorrieta

Francisco Elorrieta |

Director de la Pastoral de la Universidad Católica (UC)

¿Cuánto tiempo quedará? ¿Cuándo saldremos de ésta? En los últimos meses quizás todos nos hemos hecho esta pregunta de alguna u otra forma, y, sin embargo, ni los gobiernos ni las oposiciones ni las mentes más brillantes del mundo nos pueden dar una respuesta. Este tipo de preguntas nos posicionan en un lugar de espera, de pausa, suponiendo que “lo bueno” vendrá después del paso de esta pandemia. Pero quizás, nosotros los chilenos, podemos aspirar a algo más.

En la última década, hemos pasado por terremotos devastadores, incendios imparables, inundaciones históricas y muchas otras catástrofes que han dejado muertes, arrastrado pobrezas, desempleos, personas sin hogar ni alimento; y hemos visto cómo cada vez millones de corazones chilenos se conmueven y surge un sentir solidario que nos une como país y nos invita a salir al encuentro de quienes más lo necesitan.

Hoy más que nunca vemos cómo los sectores vulnerables en Chile se han vuelto focos agresivos de esta pandemia, no solo en términos sanitarios, sino también de empleo, vivienda y pobreza. Hay hogares de ancianos que se están quedando sin medicamentos, comedores de calle que no tienen alimentos, y miles de personas que por su reciente desempleo no pueden pagar el arriendo y tienen que tomar la decisión de abandonar un estilo de vida para llegar a alguna toma o campamento.

Es por esto que la pregunta que debemos comenzar a hacernos es ¿cómo puedo ayudar hoy a quienes más lo necesitan? Esta pregunta nos saca de esa pausa, de espera, nos moviliza a vivir el “hoy” de una manera diferente. Y no solo eso…es contagiosa.

Estar encerrados y ser solidarios pareciera que no “pegan”, que no tienen mucha compatibilidad. Lo primero y casi único que se nos ocurre es hacer un aporte monetario a la distancia (algo que ya es de muchísima ayuda), pero una crisis sin precedentes exige soluciones sin precedentes, es el momento de ser innovadores en la solidaridad, ser proactivos, buscar nuevas maneras de apoyar a otros y de contagiar en ese camino, de hablar con nuestros cercanos, buscar maneras y concretarlas. Si podemos ser solidarios en esta pandemia, no lo seamos solo de nuestro bolsillo, sino también de nuestro tiempo y sobre todo, de nuestro corazón.

Podemos hacer de ésta una pandemia diferente, una pandemia que nos una como nación, que nos acerque a quienes más sufren, una pandemia que contagie de manera más fuerte una solidaridad que nos incomode y llene de esperanza. No podremos combatir la muerte y la enfermedad de esta crisis, pero si podremos acompañar en ese dolor, podremos apoyar con iniciativas propias, con apoyo a fundaciones, y podremos contagiar a otros para que hagan lo mismo. Dejemos de esperar, de dejar que las semanas pasen para que la situación mejore, seamos nosotros los gestores de este cambio solidario que tanto necesita Chile, seamos los gestores de una revolución que marque un cambio en la historia de esta pandemia, y todo esto parte simplemente haciéndonos la pregunta ¿cómo podemos ayudar hoy a quienes más lo necesitan?